ÍCARO REDIMIDO: (3) “Héctor, el nuevo amigo”
“Bendito aquél que viene en nombre del Señor.” – (Salmos 118:35)
La dirección de nuestros trabajos, identificando en Alberto, el suicida que despertaba en las Cavernas del Sueño, un riesgo inminente de ovoidización, nos convocó para la actuación sin demora.
Olegario, mi dilecto compañero de servicios, me esperaba para la partida inmediata. Teníamos poco tiempo para los procedimientos habituales necesarios a la jornada y debíamos apresurarnos.
No piensen los amigos que podemos penetrar en las sombras sin la debida preparación.… Leer el resto ...